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.:: Abrir y cerras las puertas ::.

- (...) Ahí acabó todo. Despues, aunque mantuvimos el contacto, solo se trataba de conversaciones vacías... Perdió el campo de gravedad que me ataba a ella. Fue el amor de mi vida. Despues conocí a mi mujer y desapareció la inspiración.

- Vamos a ver, resumiendo, el amor de tu vida fue una mujer dominante, con mal despertar, caprichosa, que no te hacía feliz y que daba portazos.

- No, no lo has ententido. Ella no daba portazos, un portazo es cuando la puerta se cierra con un estrépito, puede darse un portazo por una corriente de aire. Ella abría y cerraba las puertas con seguridad, autoritaria y soberbia... Es el concepto más cercano al arte que he presenciado, y si quieres que te diga la verdad, es lo único que echo de menos... Eso y sus manos frias es mi espalda.
Pilar C. Sánchez

Pilar C. Sánchez

Escritora por hábito y por vicio, lectora por extensión. Escéptica, anarcocap, dice un título de la UCM que periodista. Con tendencia al caos (ordenado), gusto por las cosas raras y el frikerío en general. Cactus y escorpión, pero se me acaba cogiendo cariño.

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